Hace tres meses que entró en vigor la Ley Sinde, que pretende evitar que se distribuyan libremente en Internet contenidos protegidos por derechos de autor. Y de momento ya son más de 300 los artistas que han denunciado el uso ilícito de su obra que se lleva a cabo en determinados situis web.
Lo que pretende esta norma es ir poniendo obstáculos a las prácticas en Internet que permiten que podamos acceder de forma gratuita y sin permiso de los autores a contenidos protegidos por copyright. Eso sí, también son muchas las personas de la industria del entretenimiento que son conscientes de que el sustento de los artistas debe empezar a depender menos del pago por copia privada.
En palabras de la responsable de la comisión antipiratería, el proceso administrativo que se dedica a controlar que se cumpla la ley, presidido por ella, lleva desde principios del pasado mes de marzo estudiando las diferentes solucitudes de forma individual.
Según las personas inmersas en el proceso, es cierto que está yendo un poco más lento de lo que se hubiera esperado. Y es que, al tratarse de un proceso nuevo, es importante estar seguros de que las solicitudes están bien cumplimentadas.
De esta forma, estos primeros meses se han dedicado a estudiar bien cada caso y a asegurarse de que cumplen con lo necesario para acogerse a la ley.
En estos momentos, se está procediendo a las votaciones sobre si se debe actuar sobre las páginas denunciadas. Cuando se notifique a una página web que está cometiendo un delito contra la propiedad intelectual, tendrán un plazo de 20 días para retirar los contenidos protegidos por derechos de autor.
Si pasado este plazo no se han retirado los contenidos del conflicto, los proveedores que dichas páginas tengan contratados se verán obligados a cortarles el servicio.
