Que las acciones de Facebook no paran de bajar no es ya ningún secreto para nadie. Como tampoco lo es el hecho de que cada vez son más los usuarios que se están cansando de la red social de Mark Zuckerberg. Por eso es hora de preguntarse si el sitio ha llegado a su techo.
El problema de la bolsa viene en parte de su valoración inicial. Muchos analistas aseguraron que su precio de salida había sido excesivamente alto alto. Esto se hizo así para beneficiar a los creadores de la compañía, que eran los que ponían títulos a la venta para recapitalizar de nuevo la empresa y obtener liquidez para afrontar nuevas compras, como por ejemplo la de Intagram.
Claro que el problema de Facebook no se encuentra sólo en lo desastroso de su salida a bolsa. Siempre hay servicios online que aunque tarden en ser rentables son muy aceptados por los usuarios. Pero parece que el caso de Facebook tampoco está siendo este.
Y es que sus datos de tráfico también se han estancado. Pese a su número de usuarios, parece que el tiempo que pasan en Facebook, así como el número de visitas diarias no avanza desde hace tiempo. Y esto tendrá una fuerte repercusión en los ingresos de la publicidad obtenida gracias a las empresas que se anuncian en la red social.
Habrá que esperar a ver con qué novedades nos sorprende Facebook en los próximos meses para intentar recuperar ese público y esa rentabilidad perdidas. Porque sus últimas novedades, como la implantación del Timeline, no parecen haber gustado demasiado a los usuarios. Por lo tanto, los responsables de la red social tendrán que ponerse las pilas y escuchar a sus usuarios para evitar convertirse en el nuevo MySpace, una red social que dominó el mundo digital y terminó quedando en el olvido.