Con tan sólo 14 años, Swartz ayudó a otros desarrolladores a crear parte del código utilizado en la herramienta RSS que le permite a los usuarios de internet poder disfrutar de información actualizada desde cualquier página web a la que se hayan inscrito previamente.
Su vocación social le inspiró a desarrollar un sistema particular de distribución de contenido web abierto y gratuito, además de incentivar las descargas de revistas científicas y literarias, de la cual fue acusado oficialmente por la supuesta descarga ilegal de más de cuatro millones de artículos y documentos online.
En el momento de su muerte, Swartz tenía cuentas pendientes con las autoridades judiciales de Estados Unidos, ya que se le acusaba de fraude electrónico e informático, por el que le pudieron condenar a 35 años de prisión y el pago de una multa valorada en un millón de dólares.
Su muerte fue anunciada en la madrugada del sábado a través del diario The Tech, un medio especializado en nuevas tecnologías que es editado por el Instituto de Tecnología de Massachusetts, según se ha publicado en The New York Times.