Aunque ahora nos cueste imaginarlo, los analistas piensan que en un futuro no demasiado lejano nos habremos cansado de tuitear. Pero esto no quiere decir que la red social del pajarito azul vaya a desaparecer ni mucho menos. Simplemente dedicaremos más tiempo a consumir contenido que a producirlo, por lo que las empresas que utilizan Twitter para introducir publicidad serán las grandes beneficiadas.
Por lo, tanto, si los informes que han salido a la luz en los últimos días tienen algo de razón, muy pronto Twitter se convertirá básicamente en un espacio publicitario. Y para que sigamos teniendo ganas de entrar en él las empresas tendrán que trabajarse la producción de contenido más interesante.
El estudio que así lo afirma se ha centrado en investigar los motivos por los que la gente tuitea, para lo cual se han monitorozado más de 2.500 cuentas que han aumentado significativamente su número de followers en los últimos meses.
Para los que al principio tenían menos de 30 seguidores, el crecimiento de su número de followers les sirvió como motivación para tuitear cada vez más. Sin embargo, entre los que tuiteaban con más frecuencia se produjo el efecto contrario: conforme iban ganando seguidores en la red social, menos contenido publicaban.
Esto puede parecer una contradicción, pero tiene su sentido. Cuando tenemos a una mayor audiencia leyendo lo que publicamos, tenemos que tener un poco más de cuidado con lo que tuiteamos. Y este aumento de celo en cuanto a las publicaciones en Twitter se suele traducir en tuitear menos. Por lo tanto, cuando en un futuro todos veamos nuestros seguidores aumentados, iremos publicando cada vez menos tuits.
Por tanto, según el informe, conforme más crece Twitter, la plataforma se vuelve menos interactiva y se convierte simplemente en un espacio para la publicidad.