Todo parece indicar que Brasil formará parte del exclusivo grupo de países que han sido capaces de desarrollar un súper ordenador de alto desempeño, lo cual les permitiría a sus operadores realizar tareas muy complejas que actualmente son imposibles de ejecutar en los ordenadores tradicionales con que cuenta el país, incluidos en sus mejores instalaciones informáticas.
Para materializar este sueño, las autoridades brasileñas se han puesto de acuerdo con las autoridades francesas, a través de sus respectivos gobiernos centrales, y han logrado firmar un acuerdo de cooperación que prevé la compra de un súper ordenador de parte de Brasil, todo ello como parte de un amplio programa de transferencia de tecnología de Europa a América del Sur.
“Sólo 10 países tienen la capacidad de construir este equipo, y ahora Brasil entrará en este selecto grupo, pudiendo desarrollar actividades de investigación en áreas estratégicas”, expresó la propia presidenta de Brasil Dilma Rousseff tras su encuentro con el presidente francés Francois Hollande, el cual se encuentra de visita en el país sudamericano.
Una vez que Brasil se haya hecho con este servicio del súper ordenador francés, sus actividades se centrarán fundamentalmente en el desarrollo de aplicaciones para áreas estratégicas como la industria del petróleo y el gas, además de atenderse el sector de la educación.
Como bien ha explicado a la agencia de prensa Associated Press el ministro de Ciencia y Tecnología de Brasil, Luiz Antonio Elias, estas serán las principales actividades que se desarrollarán con esta nueva tecnología de punta; aclarando además que este equipo “va a ampliar la capacidad de investigación científica y tendrá un impacto no solo para la ciencia, sino también para empresas, la industria y el mercado, porque estará ligado a muchas áreas en el país”
Como bien se ha podido conocer, este nuevo súper ordenador que muy pronto llegará a Brasil procedente de Francia será instalado y comenzará a realizar sus primeras operaciones a finales de 2016, y el mismo estará disponible para sus usuarios desde el Laboratorio Nacional de Computación Científica, cuyas instalaciones están ubicadas en Rio de Janeiro.