Según se ha podido conocer, esta demanda contra Instagram fue presentada por una usuaria llamada Lucy Funes, la cual compareció ante el Tribunal de Distrito Norte de San Francisco, California, motivada por los nuevos cambios que se habían anunciado desde la propia administración de Instagram, los cuales afectarían el modo en que los usuarios se comportarían con el servicio recibido.
Como bien ha publicado Reuters, Instagram sostiene en su defensa que Lucy Funes no tiene ningún derecho a llevar a delante su queja, ya que fue ella misma la que decidió eliminar su cuenta antes de que se hicieran efectivos los cambios anunciados en el nuevo contrato con los usuarios.
La demanda contra Instagram se presentó el 21 de diciembre de 2012, un mes antes de que los nuevos términos anunciados entraran en vigor, cuya fecha de inicio estaba planificada para el día 19 de enero.
Vale la pena recordar que el año pasado los responsables de Instagram anunciaron nuevos cambios en las condiciones del servicio a la que se deberían someter los usuarios, aunque un tiempo después se rectificaron algunos puntos, sobre todo hicieron énfasis en que la compañía no iba a vender las fotos de sus usuarios, ya que estas modificaciones anunciadas habían causado una gran indignación en toda la red.
Instagram es una aplicación gratuita, pensada inicialmente para los dispositivos de Apple pero que después se extendió a otros sistemas operativos, como Android, la cual permite a sus usuarios aplicar ciertos retoques fotográficos y una vez finalizados los trabajos de poder compartir sus imágenes en las diferentes redes sociales.