1- Tus publicaciones no están guardadas en ningún sitio
La mayoría de los que empiezan a usar WordPress creen que sus entradas se encuentran guardadas en algún archivo estático en su servidor. Pero, no constituyen un archivo aparte, sino que se guardan en la base de datos.
2- WordPress comprime de fora automáticas las imágenes
El CMS cuenta con un sistema de compresión para que las imágenes no ocupen tanto espacio en el servidor y para que tu blog tarde menos en cargar.
3- Cualquiera puede conocer la versión de WordPress que usas
La versión que utilices de WordPress es mostrada por el CMS, de diferentes maneras.Una de ellas es mediante el archivo readme.html que forma parte del paquete de instalación de la plataforma, al que se puede acceder de forma pública.
4- Se puede conocer el tema que usa cualquier blog
Si ves un blog que tiene una plantilla que te gusta y estás pensando en la posibilidad de utilizarlo en el tuyo, puedes hacerlo. Hay muchas herramientas para ello, pero la más sencilla es un plugin para Chrome llamada Theme Sniffer, que podemos descargar de forma gratuita.