Los pequeños emisores de radio online suelen decantarse por esta opción, puesto que para emitir en directo tendremos que pagar a nuestro proveedor de Internet dependiendo del número de oyentes que tengamos: cuanta más audiencia más ancho de banda se necesita, por lo que se requiere de más recursos económicos para mantenerlo. Mientras que en el caso de los podcast, al poder descargarlos cuando se desee no suele haber muchos oyentes a la vez y no son necesarios tantos recursos.
Aunque se trata de una herramienta que existe desde hace más de 10 años, la verdadera revolución del podcast ha venido de la mano del smartphone. Y es que para escuchar la radio online desde el móvil cuando estamos fuera de casa necesitamos un consumo considerable de nuestra tarifa de datos, mientras que si descargamos el programa en casa mediante wifi y luego lo escuchamos cuando queramos nos evitamos estos problemas.
Aún hay mucha diferencia entre el número de oyentes de los podcast y el de los programas de radio en directo. Sin embargo, el término está dejando de ser algo exclusivo de los aficionados del medio para convertirse en algo mucho más generalizado. Parece poco probable que el podcast termine desplazando a la radio tradicional en un futuro, pero lo que sí está claro es que será una alternativa a tener cada vez más en cuenta.