Sorpresivamente, los carteles de No hay iPhone 4S fueron colgados a las puertas de las tiendas de Apple en los que se iban a vender el nuevo iPhone 4S, en este caso dos tiendas en Pekín, la capital china, y otras dos tiendas en la ciudad de Shanghái. Estas cuatro tiendas no abrieron hoy, para sorpresa y enfado de sus clientes, provocando una tensa situación que obligó a las fuerzas del orden público a rodear dichos establecimientos.
En el caso particular de Pekín, un grupo numeroso de personas habían hecho cola desde primera hora de la madrugada, justo a las puertas de la tienda que Apple tiene ubicada en el centro comercial de Sanlitun, pero en esta oportunidad no estaban sólo los usuarios que desean comprar el nuevo iPhone 4S, sino también un grupo significativo de revendedores ilegales que tenían la intención de comprar el teléfono en masa, hasta que se agotara en dichas tiendas, y luego revenderlos en la calle a precios muchos más caros.
Tal y como declararon a la agencia de prensa EFE varios de los compradores que esperaban a las puertas de la citada tienda desde horas temprano de la madrugada, estos incidentes con los revendedores motivaron que el local decidiera no abrir sus puertas a las 10.00 de la mañana como estaba previsto, con lo que se creó un intenso malestar a las afueras que obligó a llamar a las fuerzas del orden público, en este caso a la policía local, para intentar poner orden.