Antes, sólo sabíamos de los actores, cantantes o deportistas lo que nos contaba la prensa. Pero ahora gracias a las redes sociales son ellos mismos los que nos desvelan aspectos de su vida privada que antes quedaban ocultos. Esto puede ser una herramienta estupenda para mantener el contacto con los fans, pero también puede ser un arma de doble filo. Y es que los famosos que escriben en Twitter pueden caernos bien o mal, y llegar a destrozar su imagen.
Esta es la razón por la que muchos rostros conocidos han dejado Twitter: los trolls o personas que se dedican a insultar sin motivos son la razón principal, y exponerse a críticas constantemente, otro motivo para dejar la red del pajarito azul.
Uno de los que ha tomado esta decisión ha sido, curiosamente, uno de los usuarios que más particiba en Twitter, Ashton Kutcher que, despuçes de haber mostrado su amor por Demi Moore públicamente y haber aguantado estoicamente las críticas que acompañaron su dicorcio, acabó dejando que fuera una empresa la que manejara su cuenta cuando una gota colmó el vaso: Ashton defendió a un entrenador de fútbol americano después de que hubiera sido despedido, creyó que había sido improcedente y lo cierto es que había sido acusado de abusar de los niños a los que entrenaba. Se le criticó tanto que acabo por dejar la red social.
En Hollywood ya se denomina a estos famosos Twitter Quitters, aunque también se llama así a algunas empresas que, después de haber creado y alimentado sus cuentas en redes sociales, las abandonaron. Otra famosa que lo hizo fue la cantante Sinead O’Connor, que aseguró que: “Twitter es, tristemente, poco seguro para la gente que hace lo que yo hago”. Courtney Love ha tenido incluso que pagar por difamar a alguien a través de la red social. Y después de ello también la dejó en manos de empresa, aunque los rumroes aseguran que puede que tenga una cuenta con un nombre falso para poder seguir opinando.