Una vez que WikiLeaks hiciera público un conjunto de documentos relacionados con el Gobierno de Estados Unidos, y que a su vez el ex soldado Bradley Manning fuera encarcelado, pendiente aún de lo que ocurra con su vida, los diferentes hackers del planeta decidieron ofrecer su apoyo público y en la red al portal WikiLeaks y a su fundador Assange.
Pero muchos de los que iniciaron aquel proyecto de WikiLeaks han abandonado la web; además, al parecer la inclusión de algunos banners de publicidad en los que se solicita la aceptación de donativos en metálico ha enfadado a los hackers de Anonymous que, puestos de acuerdo, han criticado abiertamente la actual política del portal web.
“Esto, queridos amigos les hará perder todos los aliados que aún tenían”, advirtió un mensaje en una cuenta de Twitter frecuentemente vinculada a Anonymous.
Aunque verdaderamente es imposible contabilizar el número de hackers enfadados con esta política de WikiLeaks, lo cierto es que los mensajes que se han publicado en Twitter son un reflejo del malestar en la red: “Hemos estado preocupados con respecto a la dirección que ha estado tomando WikiLeaks durante algún tiempo” o “En el mes reciente el enfoque cambió cada vez más y más, de filtraciones tangibles y de la lucha por libertad de información, a concentrarse más y más en Julian Assange”, demuestran esa desilusión.
Por otra parte, al parecer la última reunión de Assange con Lady Gaga sirvió para alterar aun más los ánimos: “no podemos apoyar más en lo que se ha convertido WikiLeaks: en el espectáculo de un solo hombre, Julian Assange”.