Una vez que ya tienes tu propia aplicación móvil desarrollada y ha sido aprobada por los técnicos, todo parece estar en su lugar. Pero lo más importante, es preguntarse cómo hacer para que ésta genere ingresos, ganancias. Pues no basta con poner un valor a las herramientas y dejarlas a la deriva en el mercado, ya que esto no funciona.
Las descargas de aplicaciones para teléfonos móviles, han sido de 7.000 millones en 2009. Para el año 2012, se estima que serán alrededor de 50.000 millones, según la consultora Chetan Sharma. Los ingresos que se encuentran asociados se incrementarían de US $4.100 millones a US $17.500 millones. Pero hay que tener en cuenta otro dato, la mitad de las aplicaciones que en 2009 eran pagas, se estima que serán totalmente gratuitas el siguiente año.
La publicidad, bienes virtuales y otras formas de lograr ganancias, serán las encargadas de la parte monetaria. He aquí el secreto; en la mayoría de los casos, el hecho de “regalar” una aplicación, puede producir ingresos a futuro.
S bien para algunos sitios de Medio Oriente y del norte de África en este año ha sido un año movido, a las redes sociales se las han apuntado como las principales responsables de varios actos que se realizaron a lo largo de los meses. Por ejemplo, la Primavera Árabe en El Cairo, en donde los ejecutivos emitían una transmisión en directo desde sus smartphones vía una aplicación llamada Bambuster, creada por el presidente de la firma Hans Eriksson.
“Los manifestantes mostraron las imágenes de lo que estaba sucediendo al mundo, algo que los medios tradicionales no podían hacer, especialmente hacia el final, cuando los periodistas fueron metidos en hoteles y debían transmitir desde los balcones”, afirmó.
“La gente estaba transmitiendo lo que veía y sentía desde la plaza. Hubo algunos momentos verdaderamente sorprendentes”, agregó. Su aplicación se encuentra disponible en forma gratuita.
“En el mundo digital, quitando el comercio electrónico y los videojuegos, todo consiste en generar volumen para capitalizar más tarde”, finalizó Eriksson.