“Publicaremos más de 100.000 cables de embajadas estadounidenses de todo el mundo antes de que termine el día”. Este fue el mensaje que difundieron ayer en la red de Twitter, con la promesa de que se harían público los cables que hasta ahora permanecían inéditos en su base de datos de más de 250.000 folios que forman parte de los documentos secretos del Departamento de Estado del gobierno de los Estados Unidos y que se han dosificado en su manera de salir a la luz pública.
Tal y como publicara la agencia de prensa Reuter, los responsables de Wikileaks tenían disponible a última hora de ayer un paquete de unos 97.115 cables de los 251.287 que forman su base de datos de documentos secretos. Según Reuters, Wikileaks no ha especificado el por qué se ha decidido hacer público esta cantidad de documentos en una sola jornada.
Sin embargo, fuentes cercanas a la dirección de Wikileaks, en especial cercana a Julian Assange, aseguran que esta gran cantidad de folios que se van a poner a disposición de los usuarios de Internet y los medios de prensa está motivada por el hecho de que la propia Wikileaks ha ido perdiendo interés periodístico en estos últimos meses tomando en consideración la enorme cantidad de eventos puntuales que se están desarrollando tanto en Europa y los Estados Unidos con su crisis de mercado y deudas, como los últimos acontecimientos del mundo árabe, en especial la guerra de Libia.
Según la fuente que es citada por Reuters, Julian Assange se siente actualmente frustrado por el escaso interés que ha presentado para los medios en estos últimos meses. ¿Habrá realmente algo nuevo de lo que ya se ha dicho? La verdad es que lo dudo.