La llegada de las nuevas tecnologías a la vida cotidiana es un hecho tan común y corriente que muchas veces no nos percatamos de los grandes cambios que se producen ante nuestras narices, en cuestiones de meses, entre un producto y otro, entre un iPhone 3 y un 4.
Todo va viajando muy rápido, los nuevos productos y servicios se presentan en el mercado tecnológico como la última novedad y, cuando han transcurrido tres meses, ya se han quedado obsoletos ante el arribo de otra marca con una oferta mejor. Quedamos desconcertados. Entonces, ¿cómo reacciona el público consumidor ante esta realidad tan agresiva para nuestra psiquis y nuestros bolsillos?
¿Queda la gente realmente satisfecha con estos productos? Evidentemente, las imágenes sociales y las opiniones de los consumidores van cambiando a la misma velocidad, lo que hoy es un producto estrella del mercado, mañana es una decepción. Un ejemplo muy reciente: todos los fans de Apple esperaban con mucha ansiedad la llegada del nuevo iPhone 4S, y lo han comprado, pero para mal de la compañía las baterías de las nuevas unidades han dado un fallo significativo: la venta de los nuevos iPhones ha dejado un nivel de decepción muy grande, muchos ya no piensan igual que hace apenas tres meses.
Concretando, las opiniones cambian a la misma velocidad que cambian los productos del mercado, no hay nada estable. Según una encuesta de Lab24, la cual tuvo como campo de estudio unos 500 usuarios, estos cambios significativos en las opiniones de los usuarios son un hecho contrastable. A modo de ilustración, aquí les dejo esta tabla resumen en la que se ilustra la visión de los usuarios acerca de las redes sociales, en especial Facebook.
Algunas preguntas de esta encuesta son: ¿Planea usted comprar el nuevo iPhone 4S? ¿Va a comprar el nuevo Kindle Fire? ¿En concreto, qué no les gusta de los cambios en Facebook? Aquí les dejo las respuestas…