Lo más habitual es que este tipo de correos fraudulentos nos ofrezcan artículos de lujo a precios muy por debajo del que ostentan en los mercados habituales. Esto sirve como gancho para atraer a los clientes a enlaces desde el que pueden robarnos nuestros datos y acceder de forma sencilla a nuestra cuenta bancaria. Así que hay que evitar fiarse de ofertas poco creíbles.
Pero las ofertas falsas no son el único fraude que nos puede llegar a nuestra cuenta de correo electrónico en estas fechas navideñas. A menudo también llegan felicitaciones de “un amigo” que nos hacen ir a enlaces desde donde toman nuestros datos o que nos instalan malware en el ordenador. La forma de evitar esto es mucho más sencilla, ya que bastará con no abrir ninguna felicitación navideña si no sabemos quién es el que la envía.
De todos modos tampoco hay que asustarse, ya que realizar las compras navideñas a través de Internet puede ser una práctica completamente segura. Lo único que tenemos que tener en cuenta es comprar en tiendas que conozcamos, ya sea porque tengan su versión física o bien porque sean de conocida reputación. Y evitar a toda costa las ofertas que nos llegan por email, especialmente si no conocemos al comerciante.