Los responsables de la administración del navegador de internet Google Chrome han anunciado la retirada de dos extensiones de su servicio. Con el nombre de “Add to Feedly” y “Tweet this page” estas extensiones se habían integrado sin muchas complicaciones dentro de este servicio de Google Chrome, pero recientemente los administradores de este navegador de internet descubrieron que las mismas entregaban publicidad intrusiva a los usuarios.
Según ha publicado el diario The Wall Street Journal, los responsables de dichas aplicaciones sancionadas por Google habían violado las normas éticas que se les imponen a los desarrolladores, motivo por el cual se les ha negado el continuar funcionando dentro de Google Chrome, por lo menos hasta que no se resuelva el problema.
Según este medio, en el caso de la primera aplicación sus creadores habían señalado a través de su blog que este problema les surgió cuando recibieron un correo electrónico en el cual se les ofrecía una gran cifra de dinero “por algo que les había tomado solamente una hora en crear”.
Sin embargo, una vez que los desarrolladores les vendieran la aplicación a sus nuevos dueños, éstos comenzaron a introducir poco a poco material publicitario, intrusivo, dentro de los servicios que ofrecían a través del navegador de internet Google Chrome.
Como bien reconociera uno de sus creadores, éstos no eran banner regulares, sino que “eran visiblemente anuncios que funcionaban de forma oculta remplazando enlaces”.
Lo mismo ocurrió con la segunda aplicación, la cual había replicado la misma metodología de distribución de publicidad inclusiva entre los usuarios de Google Chrome. Se dice que este servicio estaba incluso relacionado con la red social Twitter.
Sin lugar a dudas, esto son sólo ejemplos de cómo algunas aplicaciones utilizadas en Google Chrome son compradas por terceras empresas y, sin que sus dueños originales lo sepan, las utilizan para introducir su material publicitario.