Según los pocos datos que se han podido conocer de este cuerdo de venta, Dell recibiría 24.400 millones de dólares por todo su infraestructura de personal y fabricas; además, sus accionistas recibirán unos 13,65 dólares por acción, lo cual viene a representar una prima del 25 por ciento con respecto al cierre de la empresa el pasado mes de enero.
La compañía Dell tiene su sede en Round Rock, Texas, y en estos últimos tiempos se había especializado en la producción y venta de soporte para ordenadores de sobremesa, servicios de conectividad en red, incluido los servidores, además de software y demás periféricos informáticos para oficinas y el hogar.
La época de oro de Dell fue a principios de este siglo, cuando el éxito de sus producciones venía acompañado de una fuerte demanda de ordenadores de sobremesa y complementos, a tal extremo que en 2008 llegó a ocupar el segundo puesto a nivel mundial después del liderato de Hewlett-Packard (HP), dentro del mundo de los ordenadores personales.
Sin embargo, al parecer le ha pasado como a muchas empresas tecnológicas, que la baja demanda de los ordenadores de sobremesa, y la alta demanda de dispositivos móviles (tablets, teléfonos móviles, portátiles, etc.) la han dejado desfasada en medio de un mercado que se va renovando cada seis meses, exponiendo nuevos dispositivos y modificando los hábitos de consumo de los usuarios.