A estas alturas, si no te has enterado del caso en que más de 100 famosas han visto como sus fotos privadas han aparecido publicadas en la red, es que no vives en este mundo. Al parecer, todo se debe a una fallo de seguridad en iCloud, el servicio de almacenamiento en la nube de Apple. Y esto ha hecho saltar las alarmas de todos los usuarios de este y otros servicios similares. A fin de cuentas, si a Jennifer Lawrence han podido robarle unas fotos, ¿por qué no nos las iban a robar a nosotros? ¿Deberíamos dejar de utilizar este tipo de servicios de almacenamiento online o podemos estar tranquilos?
Antes que nada, no debemos entrar en pánico. Lo “normal” es que no pase nada y que las fotos que almacenemos en este tipo de servicios estén totalmente seguras, pero no está mal conocer su funcionamiento y tomar algunas precauciones.
Cuando subimos fotos a la nube, lo que estamos haciendo es almacenarlas en un servidor remoto, es decir, que en lugar (o además de) almacenarlas en nuestro propio ordenador o teléfono móvil las estamos guardando en otro. Cuando las subimos en modo privado, nadie puede acceder a esa información a no ser que disponga de nuestra contraseña, por lo que en principio no tendríamos problemas, pero si hay algún agujero de seguridad alguien podría conseguir nuestra contraseña y utilizarla.
¿Y qué podemos hacer para evitarlo? Pues no podemos impedir que alguien nos robe la contraseña, pero sí que haya imágenes demasiado privadas rondando por ahí. No cuelgues en la nube imágenes demasiado comprometidas y desactiva la opción que sube automáticamente todas las fotos que hacemos con el móvil. Sólo así podrás evitarte problemas.
Foto | Javier Domínguez Ferreiro